En la zona de Fox hay 2 cosas que no hay que perderse, el lago Matheson y el trekking de las Gillespies Beach para ver la colonia de focas que hay. Para el primero no se necesita demasiado tiempo pero merece muchísimo la pena. Se trata de un lago de color oscuro donde se pueden sacar unas fotos increíbles del Monte Cook (3.723m) y el Monte Tasman (3.497m) reflejados en sus aguas. El paseo es muy agradable y es apto para todos los públicos.
El trekking de las Gillespies Beach lleva más tiempo recorrerlo (unas 5h i/v). El camino discurre por sendero de bosque húmedo atravesando numerosos puentes sobre lagos y ríos. La vegetación es de un verde tan intenso increíblemente repleta de kauris y helechos gigantes.
Para llegar a la zona donde se dejan los vehículos, hay que conducir por una pista sin asfaltar durante unos 12km. Sin duda, la visita merece mucho la pena.
Al llegar al final de la playa se puede divisar la colonia de focas que habita en ella. Se llega hasta muy cerca y se les puede hacer muchas fotos. La experiencia es alucinante.